Algo se empieza a mover y mucho en la Universidad.
Aparece en el Pais un artículo que llama la atención.
“Me enteré de mi despido en el cajero”
Es la historia de un profesor contratado doctor que fue despedido sin que le avisaran.
Destaca la noticia la mala educación de la administración. Supongo que lo es por la falta de procesos estandarizados en la administración pública para esos casos
Pero me resultan de interés dos temas que parecen secundarios.
Se ha despedido a profesores Contratado Doctor (aunque por ahora se respeta la figura del Titular de Universidad). Esto no estaba previsto que ocurriera.
Aunque para mí (y esto es pura política universitaria) es sustancialmente más grave lo que viene por abajo.
“En el caso de Estadística, los docentes afirman que el centro lleva dos años quitándoles asignaturas y que ellos no deberían pagar por la “mala organización”.
En realidad es un efecto de las últimas modificaciones de las leyes y reglamentos que gobiernan la asignación de asignaturas a áreas de conocimiento. Según estas normas un profesor de Ingeniería de Construcción puede impartir Tecnología Eléctrica si la Universidad así lo considera oportuno.
Eso no sería intrínsecamente malo. Si la decisión de que imparta uno u otro tiene que ver con como la calidad docente y/o del docente sería razonable. Pero puede haber otros motivos, donde la calidad de la docencia no sea relevante.
Por ejemplo en este caso hay quien le echa la culpa a la propia relación institucional entre miembros de la Universidad. Aunque supongo que tiene que ver con la lucha encarnizada de los “míos” frente a los “tuyos”:
El departamento más afectado ha sido el de Estadística, donde trabajaban siete de los once docentes que se han ido a la calle. De sus 13 profesores, solo se quedan los que tienen plaza por oposición. Varios de ellos relacionan el hecho de que muchos despidos se concentren en Estadística con el enfrentamiento que mantiene el rector, Pedro González-Trevijano, con uno de los catedráticos de Estadística, David Ríos.
Otro efecto más de la crisis.